La diabetes mellitus es una enfermedad que padece un gran porcentaje de mexicanos y se debe al exceso de azúcar que circula en el torrente sanguíneo. En estos casos, cuidar lo que se come es vital.

La nutrióloga en medicina funcional Georgina del Ángel Cabrera nos dice cuáles son los peores hábitos alimenticios si padeces este trastorno metabólico.

1. No consumir verduras frescas
Sus altos contenidos de fibra insoluble y solubleregulan los niveles de azúcar en la sangre. Además, ayudan a nutrir la flora intestinal (microbiota) para restablecer la salud de ésta, lo cual también es importante para normalizar la glucosa en el cuerpo.

2. Comer demasiada fruta
A pesar de ser productos naturales, comerlas constantemente (sean jugos o porciones) incrementa la glucosa de la sangre. Y, si bien son una buena fuente de azúcar, comerlas sin medida es negativo para la salud de un diabético.

3. Ingerir cereales en exceso
Dentro de este grupo están el arroz, tortillas, pan, pastas, avena, trigo, cebada, etcétera. Cada uno aporta cierta cantidad de nutrientes, sin embargo, debes tener en cuenta que sólo debes consumir lo que tu cuerpo puede absorber y la glucosa es uno de ellos.

Por lo que, si comes cereales en cada comida del día, es muy probable que tengas más glucosa de la que necesitas. Y eso también puede disminuir la eficiencia de la insulina.

4. Incluir alimentos procesados
Al estar empaquetados, enlatados y envasados, necesitan de diferentes tipos de azúcar para que se conserven. Al ingerirlo, añaden más azúcar a la dietasin que se note demasiado, lo cual puede perjudicar la salud.

Consejos extra
La alimentación es importante, pero también es recomendable mantener el cuerpo en movimientopara que el azúcar se pueda absorber con mayor facilidad. Esto se debe a que la insulina (hormona que se encarga de procesar la glucosa) se activa cuando se hace una actividad física.

Dormir bien es otro punto que debe considerarse. Al no descansar bien, los ciclos del sueño se interrumpen y esto origina la producción deadrenalina y cortisol (hormona del estrés), como consecuencia, la insulina también empieza a liberarse en el cuerpo y (con el tiempo), el organismo puede volverse resistente a los efectos de la insulinapor la constante liberación de la misma.

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