Las recientes declaraciones de funcionarios canadienses y estadounidenses en torno a que saldrán del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) si no se incluyen sus peticiones son “posicionamientos”, pero es parte de la estrategia negociadora, dijo el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.

Al término de la reunión con embajadores, empresarios, ministros y consejeros de ProMéxico con motivo del 10 aniversario de este organismo, el funcionario dijo: “Tenemos que entender que cualquier cosa que ocurra antes del 16 de agosto son posicionamientos, habría que esperar el arranque de las negociaciones para ver cómo se desenvuelve el proceso y cada quien hace su estrategia como cree más conveniente”.

El martes pasado, funcionarios de Canadá aseguraron que saldrían del TLCAN si los estadounidenses insisten en eliminar el capítulo de solución de controversias por dumping y subsidios, mientras que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que si no reciben el trato que quieren dejarán el acuerdo comercial.

Si se regresara a un comercio sin tratado comercial, dijo que México tendría que aplicar el arancel que registró ante la Organización Mundial del Comercio de 35% en promedio, mientras que EU debería aplicar 4.5%.

Dijo que mientras Estados Unidos tuvo que enviar sus objetivos al Congreso a más tardar el 17 julio pasado, en México se tendrán que mandar los planteamientos del nuevo calendario de negociaciones en el próximo periodo ordinario de sesiones.

Dijo que se parte de la estrategia de que no se aceptarán acuerdos que signifiquen perder los alcances que se tienen en el TLCAN, ni aranceles ni cuotas para administrar el comercio.

“El presidente [Enrique Peña Nieto] dio los grandes trazos: nada que nos haga retroceder en materia de apertura” y los estadounidenses en sus objetivos del 17 de julio pasado no plantearon aumento de impuestos a la importación ni imposición de cuotas.

Parece que las partes coinciden en que la renegociación del tratado entre Canadá, Estados Unidos y México es para “fortalecerlo”, no para “debilitarlo”, indicó.

Sobre la incorporación del capítulo laboral que propuso Estados Unidos, dijo que México estará de acuerdo si se logra considerar que el libre comercio genere beneficios a los trabajadores.

En su exposición, Ildefonso Guajardo dijo que después de que el gobierno mexicano firmó el TLCAN el país estuvo en una zona de confort que lo hizo dormirse en sus laureles, pero ante la renegociación del TLCAN con el cambio de administración estadounidense es necesario reavivarse y cambiar de postura.

Lo que debe hacerse es “diversificarnos para que una próxima elección en Washington no ponga en vilo la economía mexicana”.

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