Para poder incrementar los salarios el reto es cambiar las condiciones de las pequeñas empresas a través del uso de la tecnología y el conocimiento, para que puedan crecer, capacitar a sus trabajadores y, posteriormente, pagarles mejor, reconoció el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón.

En estos momentos no hay condiciones para incrementar el salario mínimo, aseguró, por lo que es necesario esperar a que la inflación baje a 3% y que terminen los procesos electorales para comenzar a discutirlo.

Señaló que “hace tiempo” que el país no generaba una tasa tan “relevante y constante” de empleos; por ello, el reto ahora es mejorar la calidad de los mismos. Insistió en que, más que generar puestos de trabajo e incrementar el salario mínimo, lo importante es fortalecer a las empresas. Para ello, “no hay de otra” que hacerlo a través de la innovación, la tecnología y la capacitación.

“Es importante generar empleos, que el salario mínimo se eleve, pero es más importante que las empresas implementen tecnología y conocimiento para que puedan crecer y generar mejores capacidades en sus trabajadores (...) Una empresa de calidad paga empleos de calidad; una empresa que apenas está en subsistencia no puede pagar más que un salario mínimo”, dijo.

“A una persona que tiene capacidades, que es eficiente y productiva se le tiene que pagar mejor, por una lógica de negocios de conservar a un trabajador capacitado. Son círculos virtuosos que hay que fomentar”, agregó.

El miércoles, EL UNIVERSAL publicó que la tasa de desempleo en el país llegó a su nivel más bajo en 10 años, pero a costa de la precarización de los empleos. México tiene la menor proporción de personas ganando más de 12 mil pesos al mes en ese lapso.

Al término de su participación en la presentación del estudio Momento decisivo: la educación superior en América Latina y el Caribe por parte del Banco Mundial (BM), el líder empresarial dijo que la iniciativa privada es consciente de la necesidad de mejorar el salario, pero que aún se está analizando cuándo y cuánto.

Adelantó que se integró una mesa de trabajo coordinada por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) para analizar el tema desde el punto de vista laboral y económico; sin embargo, aún no hay condiciones para incrementar el salario mínimo.

“Mientras haya procesos electorales en cuatro entidades con posicionamientos políticos específicos, pensamos que el momento propicio es posterior. El momento adecuado será cuando la inflación tome una tendencia definitiva hacia el 3%. Todavía no la vemos; esperemos que pronto”, dijo.

Mencionó que los empresarios están preocupados por las variables macroeconómicas, como una posible subida en las tasas de interés para controlar la inflación; insistió en que deben encontrarse las condiciones necesarias para ser responsables al aumentar el salario mínimo, de manera que esto no afecte la inflación.

“Estamos en la consciencia de que debe seguir la tendencia de mejoramiento del salario mínimo para que alcance los niveles de la economía formal eventualmente, pero hay que determinar en qué momento y en qué cantidad. Hemos ido mejorando el poder adquisitivo del salario mínimo”, agregó.

Salarios para egresados. En México, los salarios para los recién graduados de la educación superior son “extraordinariamente bajos”, reconoció el director general de Educación Superior Universitaria de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Salvador Malo. Un egresado puede aspirar a un máximo de 17 mil pesos mensuales y después lograr escalar hasta los 25 mil pesos, ingreso que no resulta atractivo. No importa, agregó, la universidad de egreso, sino la familia de origen y las relaciones que se construyan.

En la presentación del estudio del BM, dijo que en México los estudiantes provenientes de escuelas particulares tienen más posibilidades de ingresar a la educación superior que aquellos que estudiaron la educación obligatoria en planteles públicos, por lo que, a pesar de los avances en cobertura que ha tenido el país, persiste la brecha de desigualdad en el acceso.

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