El robo de combustibles que se registra en la red de ductos de México, además de impactar a Pemex, genera pérdidas a las estaciones de servicio, sobre todo las de Puebla, Zacatecas y San Luis Potosí, las cuales sufren pérdidas de hasta 10 mil pesos diarios por cada gasolinera, ya que la “ordeña” interrumpe el suministro de gasolinas y diesel a esos estados, aseguró el presidente de Onexpo Nacional, José Ángel García Elizondo.

Aproximadamente 85% de las mil 150 gasolineras que hay en esos tres estados registran afectaciones por esa situación, lo que se traduciría en 9.7 millones de pesos de pérdidas en solamente un día, expuso.

“Últimamente se ha intensificado más la ordeña de productos”, lo que además de que afecta a las gasolineras pone en riesgo a la población, agregó el director técnico y de servicios al asociado e imagen de Onexpo Nacional, Víctor Hugo Arellano Benítez.

Desde hace un año el robo afecta a los estados que dependen de los ductos más “atacados” por el ilícito: Minatitlán-México-Puebla y, Tula-Aguascalientes, y Zacatecas, expuso García Elizondo.

Pero también ha habido afectaciones en Oaxaca por las movilizaciones de los maestros que impidieron la salida de pipas para surtir a las estaciones de servicio.

Cuando Pemex detecta el robo del combustible en ductos cierra tramos y ello impide que llegue el combustible más rápido, lo que genera que las gasolineras se queden sin suministro por horas, un día o hasta día y medio, pues abastecer por vía terrestre tarda más, explicó Arellano Benítez.

El problema es que “la ordeña pone en riesgo a la población y detiene el suministro por ducto”, dijo García Elizondo, en la presentación de la Convención Onexpo 2015 que se realiza desde hoy y hasta el viernes.

Si bien Pemex afirmó que se enviaría gasolina sin terminar por ductos, apenas está a prueba de Minatitlán a Villahermosa y Salamanca a Guadalajara, según lo dicho por las autoridades, planteó Arellano. Y agregó que la meta es que ese proyecto de enviar combustibles semi terminados se extenderá a todos los ductos.

“Dependiendo el producto y la capacidad de Pemex se deja de suministrar un producto, a veces las estaciones no tienen Magna o Premium, pero si tienen diesel, o dejan de tener, pero tienen otro tipo de gasolinas. Se interrumpe el suministro de determinados productos, en ocasiones llegan a quedarse, una hora, o tres horas sin alguno”, dijo Arellano Benítez.

Interés de empresas extranjeras. La reforma energética atrajo ya la atención de Exxon Mobile, Shell, BP, Conoco, Puma, Uno, entre otras petroleras, que pretenden participar en el mercado de las gasolinas en 2017, cuando se permitirá la entrada de nuevos jugadores, expuso García Elizondo. Agregó que el problema que esas empresas ven en México es un mercado muy pulverizado, es decir, que 75% de las gasolineras tienen de una a dos estaciones, en lugar de que pertenezcan a varios grupos.

El aumento de la competencia provocará que el margen de ganancia de las empresas, que actualmente es de 6.5%, se reduzca a 4 o 4.5%, por lo que, dijo, las gasolineras deberán de buscar otras fuentes de ingresos como instalar cafeterías, tiendas, ofrecer recargas telefónicas o cualquier otro negocio dentro de las instalaciones.

A la fecha, 100% de los ingresos de estas unidades en México es por venta de diesel y gasolina, mientras que en otros países como Estados Unidos 67% de la utilidad es por las tiendas o restaurantes que se instalan en el mismo predio.

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