Las autoridades de México y Estados Unidos decidieron mantener el programa por el cual funcionarios de la Administración General de Aduanas (AGA) operan en la aduana estadounidense de Laredo y, en los próximos meses van a dar a conocer la ampliación, es decir, nuevas rutas aéreas y sectores que pueden sumarse al proyecto, dijo el titular de dicha dependencia, Ricardo Treviño.

Destacó beneficios concretos que reportan los exportadores mexicanos y estadounidenses en cuanto a disminución de tiempos y costos de logística. Y por ello próximamente se va a lanzar la tercera prueba en San Jerónimo, Chihuahua.

Anunció que entre agosto y septiembre se va a poner en marcha el predespacho en dicha aduana en donde se pretenden agilizar los trámites para la revisión de documentos y mercancías de aquellas empresas mexicanas que exporten equipos electrónicos, eléctricos y computadoras, y que obtengan el permiso.

“Estamos en un proceso de acuerdo para ver condiciones legales y de inversión de los participantes del parque industrial San Jerónimo y la empresa Foxconn… Espero que el convenio se firme en los próximos días y tan pronto suceda, estimamos que la construcción de las instalaciones necesarias para implementar el programa tarden cerca de tres meses. Estimamos por eso que en agosto y septiembre estaríamos iniciando con la primera empresa”, expuso.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Treviño explicó que los programas piloto del llamado predespacho conjunto en el aeropuerto de Laredo, Texas y la de Mesa de Otay, beneficiaron a 12 empresas, aunque consideró necesario incrementar el número de exportadores participantes.

Durante el periodo de prueba de la aduana de Mesa de Otay, en Baja California, donde operan, desde el 12 de enero de 2016, agentes de la Oficina de Protección de Aduanas y Fronteras (CBP, por sus siglas en inglés) revisa a camiones de carga que transportan mercancía mexicana de exportación a Estados Unidos, y donde se observaron tiempos de reducción de cinco horas a 15 minutos.

Hay cinco exportadores mexicanos que realizan sus trámites y revisiones en esta aduana de predespacho conjunto. Pero se espera aumentar el número de compañías.

El programa piloto en esta aduana de Baja California se destinó para productos agrícolas de la llamada lista del Programa Nacional de Liberación de Productos Agrícolas, en el que hay 30 frutas y verduras.

Cerca de 99% de la mercancía que cruzó por Mesa de Otay rumbo a Estados Unidos ha sido principalmente berries, mora, zarzamora y fresa.

“Ha sido un crecimiento exponencial y esperamos que siga creciendo, tenemos capacidad de atender 125 cargamentos por día”, dijo Treviño.

En el caso del plan piloto en el Aeropuerto Internacional de Laredo, Texas, hay siete empresas que obtuvieron el permiso para exportar mercancía, que envían 16% de los cargamentos que salen de dicho lugar. Las firmas redujeron 50% sus costos de logística y 60% en los tiempos.

Como transcurrieron los seis meses de prueba ahora se analiza extenderlo más allá de las ocho rutas que van de Estados a ocho distintos aeropuertos de México.

“La decisión que hemos tomado entre la autoridad de Estados Unidos y la mexicana es que sí vamos a continuar con el programa derivado de estos beneficios que nos han dado los usuarios de reducción de costos, y tiempos, estaremos ampliando rutas y sectores. La fecha para definirlo es 12 de julio”, enfatizó Treviño.

Aunque hay que considerar que los principales usuarios de la ruta comercial, de Laredo a México son normalmente empresas del sector automotriz y de autopartes, que utilizan la ruta aérea en casos de urgencia, cuando se descuadran tiempos o se atrasa un proveedor, de lo contrario lo enviarían por la vía terrestre.

Para el futuro se espera que esta aduana de Laredo la puedan usar exportadores estadounidenses de otros sectores que envíen sus cargamentos a México.

La inversión que se realiza para implementar el Proyecto de Integración Tecnológica Aduanera (PITA) “se reflejará en los próximos meses” y está en plena ejecución, afirmó el titular de la AGA.

Este mecanismo incluye modernizar 60 puntos de revisión con la instalación de 14 mil 400 cámaras con sensores, entre otros equipos, con el fin de tener control de 99% de la operación aduanera del país.

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